En estas imágenes previas al trabajo podemos observar la complejidad
de las paredes
Para la realización de este vestidor hubo que solucionar una serie de problemas enquistados en la construcción primitiva de la casa. Columna, vigas, huecos, salientes y radiador obligaron a realizar un estudio muy minucioso de los espacios.
Exceptuando el hueco para entrar en la habitación, las cuatro paredes tienen su habitáculo de armario. Tres paredes se cierran mediante puertas con cuarterones y espejos. En una pared, la frontal y dedicada a zapatero, se prescinden de ellos.
Todas las puertas carecen de tirador y su apertura se realiza mediante una leve pulsación.
El interior en melamina y el exterior totalmente lacado en blanco puro.
